martes, 16 de septiembre de 2008

Reflexiones de un lector

El 22 de agosto en el sitio www.elsalario.com.ar publicamos el informe "La experiencia laboral de los profesionales se premia en la Argentina mejor que en Europa", a los pocos días recibimos el siguiente comentario de uno de nuestros lectores en el exterior que consideramos de interés para compartir en el blog.

Sobre el informe sobre los salarios y como van aumentando con la experiencia laboral hago los siguientes comentarios:
El tema se puede ver al reves: en Argentina la falta de experiencia se castiga mas que en Europa, por lo cual los recién graduados tienen sueldos bajísimos y solo con el tiempo se van acercando a un nivel normal. En Europa, y en lo que llamamos primer mundo, la educación o formación se premia de entrada mejor que en nuestro país. En Argentina de entrada desconfían mucho, y solo con el tiempo te van reconociendo méritos y los van recompensando.

Otro detalle interesante, la distribución de los ingresos en una empresa refleja un poco también la distribución de ingresos del país, en parte por cuestiones culturales. En países latinos donde las sociedades son mas clasistas, la diferencia entre el sueldo de alguien mas junior con la de alguien mas senior es mas grande que en países del norte donde hay mayor igualdad. Es decir que en sociedades como Alemania o Suiza ya se empieza con un sueldo mas elevado porque la diferencia de "status" no es tan grande como en un país de cultura latina (por supuesto que hay diferencias tambien, pero me refiero a comparar las magnitudes entre las dos culturas).
Bueno espero que les haya resultado interesante.
Gastón (argentino que reside en Europa hace más de 10 años)

¿Y vos que opinás? Dejá aquí tu comentario.
El equipo de ElSalario

martes, 26 de agosto de 2008

La movilidad de los haberes previsionales no puede tener topes ni restricciones



Por la Dra María América González

Dip. Nacional Solidaridad e Igualdad (SÍ)

Presidenta de la Comisión Tercera Edad HCDN



El Poder Ejecutivo Nacional envió al Congreso de la Nación el proyecto de ley de movilidad de haberes jubilatorios, tal surgía del compromiso asumido y plasmado en la letra de la ley de Presupuesto Nacional 2008. En este marco, comenzó el debate en la Cámara de Diputados con fuertes observaciones técnicas que expuse en la Comisión de Previsión, y que considero importante compartir con los lectores a fin de que todos opinen al respecto:


- El proyecto del PEN elimina el cálculo de la PBU estableciéndola como un monto fijo a través de la ley de Presupuesto.

En este sentido, rechacé este artículo, ya que de cumplirse sólo una parte del haber sería móvil, cuestión que afectaría a todos los jubilados pero en mayor medida al 76% de los jubilados y pensionados que actualmente cobra la mínima. Por ejemplo, si el haber mínimo es hoy de $690 y la PBU de $326, sólo poco más del 50% del haber sería móvil ya que la PBU estaría fijada anualmente a través del Presupuesto Nacional.


- Asimismo, reclamé la recomposición de los haberes previsionales antes de aplicarse la movilidad.

Los sucesivos aumentos otorgados por el Poder Ejecutivo han ido achatando la pirámide de haberes; es decir, trabajadores pasivos que antes tenían ingresos mayores ahora cobran el haber mínimo. Es por esto que antes de aplicar el índice de movilidad, debe "desengancharse" del haber mínimo a todo aquel jubilado que antes de los aumentos no cobraba el haber mínimo.


- También observé la fórmula de cálculo de la movilidad puesto la misma plantea severas restricciones que perjudican a los trabajadores pasivos.


1- Establece un tope del 90% de los recursos tributarios (0.9 en la fórmula). El 10% restante de los tributos serán destinados al Fondo de Garantía y Sustentabilidad. Es decir, una persona trabaja y aporta toda su vida; y cuando se jubila debe resignar un porcentaje de su haber para financiar el Fondo de Garantía que paradójicamente debiera ser destinado a cubrir su "propia prestación". En mi opinión, resulta incomprensible que los propios jubilados sean los encargados de financiar un fondo de garantía, cuyos recursos son discrecionalmente manejados desde el Ejecutivo y que se aplican a cuestiones como ser, por ejemplo, el financiamiento a 10 años de la empresa AYSA o Yacyretá.


2- Establece un tope al dividir los recursos totales por cantidad de beneficios. Al crecer los beneficios por envejecimiento poblacional o por una moratoria se incrementaría considerablemente el número de beneficios, y por lo tanto los recursos irán disminuyendo, puesto más personas irán ingresando al sistema.


3- En la fórmula no se incorporan los recursos que más han crecido, es decir los aportes personales y las contribuciones patronales.


4- La fórmula consta de dos partes, el tramo b es tal vez el más conflictivo. Mi primera disidencia al respecto es que toma el salario a través del índice general, en lugar de tomar el índice de variación salarial de los trabajadores registrados.

Y para las siguientes observaciones les propongo leer la fórmula:

A= 0.5*RT*0.9+0.5*W

B= r*1.03

(A) surge del promedio del 50 % de la variación de los recursos tributarios más el 50% de la variación de los salarios.

(B) Es (r) es la variación anual de los recursos totales divididos por los beneficios, más un 3%.


Para traducirlo al castellano lo ejemplifico de la siguiente forma:

Si (A) crece mucho el límite es (B). Por ejemplo: Si en un momento el índice arroja un crecimiento de (A), digamos que un 20% que implica una erogación de $500 y el tramo (B) resulta ser del 7% que implica erogar $200, entonces pagarán $200.

Pero si en un segundo momento (A) resultará crecer el 3% y necesitara erogar $100, mientras que (b) diera igual que antes 7% y requiriera erogar $200, en este caso pagarían $100 y no irían recomponiendo aquello restringido en la primera instancia.


Como podemos ver entonces, si la ley de movilidad quedara plasmada mediante esta fórmula, los jubilados y pensionados se verían seriamente perjudicados. Y es en este sentido que he planteado mi rechazo al proyecto oficial, aunque continúo trabajando con la expectativa de que se produzca un verdadero debate y podamos arribar al consenso de un proyecto que favorezca a todos los jubilados y pensionados.


domingo, 29 de junio de 2008

Solo el 22% de los que trabajan horas extras las cobran

Nuevos resultados de la encuesta de ElSalario.com.ar indican que un 24,5% de los trabajadores cumple una jornada de más de 48 horas semanales pero de ellos, sólo el 22,2% cobra como extras el exceso de horas trabajadas.
En efecto, el 7,9% declaró que las horas extras le son abonadas como horas normales, un 7,6% que le son compensadas con horas no trabajadas, un 3,7% que se le retribuye parcialmente con dinero y parte con tiempo no trabajado y una inmensa mayoría -58,6%- que no recibe compensación alguna por las horas extraordinarias trabajadas.
El artículo completo lo podés leer en la página de ElSalario.com.ar

¿Qué opinás sobre este informe? Te invitamos a dejar aquí tu comentario.

martes, 10 de junio de 2008

Apenas la mitad de los trabajadores argentinos cumple una jornada laboral normal

Según los resultados de nuestra encuesta, apenas el 58,2% de los trabajadores cumple una jornada de trabajo entre 35 y 48 horas semanales.
Es decir, sólo un poco más de la mitad de los ocupados cumplen una jornada normal.
Un 17,3% trabaja menos de 35 horas y un 25,9% cumple una jornada de más de 48 horas semanales.
Esto es lo que surge de un total de más de 10.000 respuestas procesadas.
Cuando se lleva a cabo el análisis a nivel de actividad, se observa que aquella con mayor porcentaje de trabajadores cumpliendo una jornada normal es la producción y distribución de energía eléctrica, gas y agua, con el 68,5%, seguida por la actividad bancaria y de seguros, con el 68,4%.
Un caso especial es el del sector educativo, donde el 44,7% cumple una jornada inferior a las 35 horas semanales, reflejando la modalidad de ocupación del área de la enseñanza.
Del mismo modo, en la administración pública se verifica que un 32,2% cumple una jornada inferior a las 35 horas por semana.
Si se exceptúan estos dos sectores, el resto de los casos con jornada inferior a las 35 horas semanales alcanza a un 13,3%. Este segmento representa, en su mayor parte, una situación de subocupación, es decir una jornada inferior a la normal para obtener lo necesario para el sustento.
Por otra parte, el subempleo se acentúa entre el personal no registrado o en negro. En efecto, en este caso el guarismo trepa al 30,7% del total.
Con relación al otro extremo, el sobreempleo –o sea los que trabajan más de 48 horas semanales- se da en mayor medida en la actividad agropecuaria, donde el guarismo trepa al 40% del total de los que trabajan en el sector. El segundo lugar lo ocupa la construcción, con el 35,9%, seguida de cerca por el comercio mayorista y minorista, con un 35,2%.
En conclusión, si bien se ha logrado una reducción en los índices de desempleo, es evidente que los problemas de subempleo y sobreempleo siguen estando presentes en el mercado de trabajo argentino.
Más información: http://www.elsalario.com.ar/